sábado, 14 de agosto de 2010

Adiós De las les y sus putas memorias

Aún recuerdo aquellos días en los que empezaba a caer en cuenta de mis sentimientos, todo era nuevo para mí y me encontraba tan aislada de todo pero, a la vez, tan cerca –ya saben, la ubicuidad del internet-. Y una noche, de click en click, llegué a ese blog que consideré –y aún considero- mi templo virtual, Memoirs of a Lencha


Me pasé varias noches leyendo y riendo a morir –las seguidoras de MOL saben a lo que me refiero- hasta que me animé por empezar uno propio, así fue como nació De las les y sus putas memorias, bitácora que consideré un reducto lésbico sobre aquel nuevo mundo personal que empezaba a descubrir. Sin embargo, hoy me veo al espejo y ya no soy la chica aquella que emocionada buscaba temas –la mayoría, mejor dicho todos, lenchos-, aquella fascinación por el mundo del lesbianismo no desapareció, es sólo que ya no es tan primordial, tan novedoso como lo era antes.

Poco a poco, mi vida personal fue colándose más y más en este blog y se convirtió en el espacio donde expresaba mis dudas y aciertos, penas y alegrías, amores y desamores. Así, un día noté que de lésbico ya no le quedaba más que la protagonista y, además, no creo tener nada de puta; por tanto, el título se fregó…

Ahora, respecto a la pregunta que me formularon personas anónimas en el cbox, ¿por qué Helado de fresa de la venganza? Como algunas de mis lectoras saben, gusto de la música de Joaquín Sabina y ésta frase se encuentra en la letra de uno de sus éxitos titulado “Nos sobran los motivos”. Es sólo una frase y no busco venganza de ningún tipo; es más, no creo tener motivos para vengarme de algo o alguien; descuiden, como una vez mi querida amiga Lo me dijo: “En tu pequeño corazón no hay espacio para el odio”.

El cambio de look. Desde que aperturé mi blog, éste no se había renovado en cuestiones de diseño y ya lo merecía, este diseño se lo debo a Ellie Tonks quien me ayudó en la difícil tarea de seleccionar la gama de colores.

En fin, estas líneas son sólo para aclarar dudas.

jueves, 12 de agosto de 2010

Queda prohibido...

Una de esas noches en que Rebeca y yo tenemos nuestras largas conversaciones "messengerales", conversábamos sobre el amor y otros demonios más... Respecto al tema, le confesé algo que ella calificó de "bonito"; después de mi momento de confesión, no pude evitar recordar este texto que leí un tiempo atrás.  Queda prohibido es un poema cuya autoría se le adjudica a Pablo Neruda; sin embargo, algunos afirman que el verdadero autor es Alfredo Cuervo Barrero, sea quien sea, no deja de agradarme.


¿Qué es lo verdaderamente importante?,
busco en mi interior la respuesta,
y me es tan difícil de encontrar.

Falsas ideas invaden mi interior,
acostumbrada a enmascarar lo que no entiende,
aturdida en un mundo de irreales ilusiones,
donde la vanidad, el miedo, la riqueza,
la violencia, el odio, la indiferencia,
se convierten en adorados héroes,
¡no me extraña que exista tanta confusión,
tanta lejanía de todo, tanta desilusión!

Me preguntas cómo se puede ser feliz,
cómo entre tanta mentira puede uno convivir,
cada cual es quien se tiene que responder,
aunque para mí, aquí, ahora y para siempre:

Queda prohibido llorar sin aprender,
levantarme un día sin saber qué hacer,
tener miedo a mis recuerdos,
sentirme solo alguna vez.

Queda prohibido no sonreír a los problemas,
no luchar por lo que quiero,
abandonarlo todo por tener miedo,
no convertir en realidad mis sueños.

Queda prohibido no demostrarte mi amor,
hacer que pagues mis dudas y mi mal humor,
inventarme cosas que nunca ocurrieron,
recordarte sólo cuando no te tengo.

Queda prohibido dejar a mis amigos,
no intentar comprender lo que vivimos,
llamarles sólo cuando los necesito,
no ver que también nosotros somos distintos.

Queda prohibido no ser yo ante la gente,
fingir ante las personas que no me importan,
hacerme el gracioso con tal de que me recuerden,
olvidar a todos aquellos que me quieren.

Queda prohibido no hacer las cosas por mí mismo,
no creer en mi Dios y hallar mi destino,
tener miedo a la vida y a sus castigos,
no vivir cada día como si fuera un último suspiro.

Queda prohibido echarte de menos sin alegrarme,
odiar los momentos que me hicieron quererte,
todo porque nuestros caminos han dejado de abrazarse,
olvidar nuestro pasado y pagarlo con nuestro presente.

Queda prohibido no intentar comprender a las personas,
pensar que sus vidas valen más que la mía,
no saber que cada uno tiene su camino y su dicha,
sentir que con su falta el mundo se termina.

Queda prohibido no crear mi historia,
dejar de dar las gracias a mi familia por mi vida,
no tener un momento para la gente que me necesita,
no comprender que lo que la vida nos da, también nos lo quita.


No hay más que agregar, el autor lo dice todo.
¡Buenas noches!